Llevo ya 12 días en Georgia. He estado principalmente en Tbilisi, la capital, aunque he visitado algunos municipios cercanos también.
Sí tenéis pensado visitar este país, aprender georgiano o en su defecto, y depende de como y para que, ruso. El georgiano es imposible, no solo por que no se parece a nada que yo conozca sino que además utilizan un alfabeto propio que no se lee ni con gafas. He aquí un ejemplo:
Es una foto de una página de un menú cualquiera, lo que está encima del «Cool breakfast» eso es georgiano. Con este panorama lo más cosmopolita en Tbilisi, ya no digo en otros sitios, es cuando ven que uno es extranjero e intenta hablarles en inglés le contestan un par de palabras en ruso para seguidamente volver al georgiano más profundo.
Es curioso el poco inglés que se habla en un país que quiere entrar en la OTAN y la UE más que nada en el mundo, o eso dice el presidente georgiano Saakashvili. Siendo sincero creo que es el menor de sus problemas en el camino hacia esas organizaciones internacionales.
Es un país pobre, el más pobre que he visto en Europa sin contar Kosovo. Es una pobreza de la que puede que no sean demasiado conscientes los georgianos. Sus vecinos viven mejor, pero no demasiado, y la pudiente UE, sobre todo los países ricos como Alemania o Francia les queda lejos. Parece que la mala situación que viven sea natural para ellos, o puede que la leve mejoría del nivel de vida que van notando en los últimos años les es suficiente. La verdad es que a saber.
La gente con la que he podido hablar se divide en dos grupos, los que apoyan al actual gobierno y opinan que todo va muy bien y que irá mejor y los que piensan que hace falta una revolución a lo país árabe y que una vez sucedido eso todo irá bien y mejor. Optimistas son. Bueno, quizás me he dejado a un subgrupo de gente, los que opinan que en la URSS se vivía mejor, de esos hay en los dos bandos, tonto entre los que apoyan al gobierno actual como entre los que lo detestan.
La gente es moderadamente amable, aunque en su mayoría les sigue chocando eso de ver extranjeros. Conducen fatal, no respetan a los peatones nunca, ni paso de cebra ni hostia. Es realmente peligroso el tráfico aquí. Las calles, sí nos olvidamos de los coches, son seguras. Es la misma historia que me chocó en Kosovo, seguridad ciudadana más que buena. La policía goza de una reputación excelente!!! La gente además te la recomienda, jóvenes y mayores opinan bien sobre ella. Esto en parte se debe a que hace años era muy mala y corrupta, pero con la nueva administración la han reformado profundamente hasta hacer de ella motivo de orgullo para los georgianos, lo cual impresiona gratamente.
Quería escribir este post a los dos días de estar en el país. Mi primera intención era empezar a soltar pestes sobre esta nación del Cáucaso sur, pero me lo aguanté. Creo que hice bien. Ahora no es que mis impresiones hayan cambiado mucho, poco ha mejorado mi opinión, pero sí me he acostumbrado un poco a lo que veo, y quizás lo comprendo mejor.
Son muchas la impresiones que uno se puede llevar aquí, y más adelante compartiré algunas más. Creo que toda impresión sí no urge debe madurar para apreciarla mejor.
Por cierto, Tbilisi no enamora en esta época del año, pero sí tiene algunos paisajes más que bonitos.
Foto hecha con el iPhone durante un paseo nocturno:
Bueno, bueno. Ya veo que te mueves bastante por la vieja Europa. Tal vez tengas un ratito para degustar unas birras en Munich a finales de septiembre con quien suscribe estas líneas…
Suerte aventurero!!! Y recuerda que el Athletic tuvo que eliminar al Dinamo de Tiblisi para clasificarse para la liguilla de la Champions. Qué tiempos!!!!
Me alegra ver a alguien de semejante calibre visitando este humilde blog. Sacaré tiempo de donde haga falta, pero tenga usted seguro que no faltaré a nuestra cita con la gastronomía bavara!
Siempre suyo,
atentamente,
Pab Vision